domingo, 27 de febrero de 2011

En honor a mi abuelo.

En este lanzamiento oficial de la Revista Aventúrate, me gustaría mostrarles un texto, que encontré después de estar buscando algunas copias y artículos que he guardado desde algún tiempo para explicar en mi tesis un concepto sobre el reportaje, se trata de un relato que escribí en la Universidad a solicitud de la maestra de redacción sobre nuestros abuelos.

Leodegario Sandoval, 'abuelo no por favor'

En muchas ocasiones escucho que los nombres largos distinguen a las personas que viven muchos años y mi abuelo no es una excepción, nació en el año de 1930, tiene en total 77 años y goza de excelente salud, aunque claro que a veces dice que le duele un brazo.

Proviene de Tlaxcala y pertenece a aquellas familias donde era un honor para la familia poner el nombre del papá, el tío, el abuelo, el padrino y demás, así que sus padres decidieron ponerle el nombre de José Gabriel Guadalupe Leodegario Sandoval Hernández, en honor a todos las personas que su mamá y papá estimaban, sin embargo, por cuestiones legales tuvo que cambiar su nombre y se puso sólo Gabriel, pero todos lo conocen como 'Don Gallo', 'Gallito' o para los nietos 'Papá Gallito', pues si alguno de sus nietos pretende llamarlo simplemente 'abuelo', él muestra un gesto de enojo o simplemente, no les hace caso. Porque para él ser abuelo es sinónimo de vejez, de antiguo, de anciano, de pesadez al caminar, de cansancio en todo y él nunca se siente así.

Es un hombre maduro, simpático, agradable con la gente, risueño al hablar, aunque tampoco voy a presumir de que es un ser perfecto, pues también sabe mostrar su molestia y su mayor enojo es a la hora de la comida, porque si algo no le gusta no tarda en decirlo. En fiestas es capaz de salir a comer tacos o simplemente dejar de comer, intercambiando comida con los demás, y eso sí, odia todo lo que tenga que ver con la leche, crema de champiñones, nunca.

Su estilo de vestir es clave de como es él, pues nunca deja las botas, en navidad o en su cumpleaños siempre hay alguien que le regale un par de ellas, y en vez de un típico sombrero siempre usa una gorra, que intercambia por sombrero cuando visita su rancho; viste siempre camisas a cuadros o lisa, pantalón de vestir, chalecos o chamarras, según sea el clima.

Mi abuelo es el más chico de sus hermanos y por ser el más pequeño siempre disfrutó de la vida en el campo, llevaba a pastar a los animales, perseguía pájaros con su resortera, participó en los carnavales y se perdía todo el día en el campo. Un día me contó que su cuñado una vez le jugó una broma y lo perdió en el cerro hasta la noche, me contó que todo ese día perdido en el campo estuvo muy angustiado, pero que después de esa broma él se hizo más precavido y no dejaba que lo engañaran fácilmente.

Actualmente, sus hermanos ya fallecieron, en el año pasado (2006) murieron tres de ellos y mientras eran los funerales se veía triste, y más cuando la gente comentaba 'ya sólo nos queda ‘El tío Gallo'. Tal vez por eso mi abuelo ya no quiere visitar mucho a su familia, porque quizás teme que le recuerden que ya no están sus hermanos y probablemente tenga miedo de que lo miren con asombro.

Pero eso no es mi abuelo, no es temeroso, y él siempre afronta con astucia todo lo que se le presenta, yo admiro de él su tranquilidad en todo, aunque a veces es muy atrevido y se atraviesa las avenidas sin tanta prudencia, además siempre hay que frenarlo un poco porque se abalanza, y así como es para decir que algo en la comida no le gusta, también lo hace con la gente que no le cae bien.

Se puede reír de todo, hace muchas bromas y casi siempre está a gusto, aunque a veces, como a todos, se desespera con el bullicio de la gente, pero eso sí, nunca llega a ser molesto y amargado. Es de los abuelos que no regañan o que piden silencio para estar junto a él, sólo cuando está dormido, porque vaya que duerme, pues esté donde esté, después de comer es lo tercero que hace, lo segundo es fumar mientras platica un rato. Gracias a esa costumbre, una vez le salvó la vida a mi hermano, cuando él apenas tenía siete años, mi hermano se cayó a la cisterna porque traía los ojos cerrados con una gorra de pasa montañas, entonces mi abuelo oyó un ruido y salió de inmediato, miró adentro de la cisterna y lo sacó de rápidamente.

Tantas cosas que implica para mí esta persona, y no sólo para mí sino para muchos otros, a todos nos enseña algo. Es el padre de mi mamá, sin embargo, gracias a él mi papá, mis tíos y mis primos aprendieron antes que otra cosa su mismo oficio de zapatero.

Todos y cada uno de los que lo rodeamos estamos al pendiente de él, todavía trabaja en su local arreglando zapatos en un mercado, y todos los que lo visitamos lo hemos sorprendido mientras duerme sentado en su banco, mientras espera que le llegue algún trabajo. Y como es muy amiguero y platicador con todos los que pasan, en especial con las mujeres.

Hace diez años que quedó viudo, pero por fortuna pudo sobresalir de esa experiencia, cuando eso sucedió, en su rostro y en su mirada se podía ver nostalgia y mucho dolor, aunque nunca lo vimos llorar, no obstante, recuerdo que cada noche visitaba el lugar donde fue velada su mujer y donde por última vez pudo ver a su compañera de siempre.

Así es mi abuelo, el que siempre está dispuesto a ser amigo de todos, el que siempre tiene un consejo o una broma, el que se sabe una que otra canción del grupo Café Tacuba, o el que siempre se hace el que está borracho y llega cayéndose a la casa.


Su mayor entretenimiento es ver la televisión, las películas de Antonio Aguilar y Pedro Infante son sus favoritas, aunque también disfruta mucho de ver las telenovelas a la hora de la cena, 'El Chavo del Ocho' es uno de sus programas favoritos y disfruta mucho de ver la televisión con alguno de sus nietos o bisnietos.

Desde que sabe que estudio Comunicación y Periodismo, sueña con verme en la televisión, dando el reporte de alguna noticia, o bien, sentada al lado de Paty Chapoy y 'Pedrito' Sola.

+José Gabriel Guadalupe Leodegario Sandoval Hernández, 27 de febrero de 1930 - 2008.










My Stick Family from WiddlyTinks.com

jueves, 24 de febrero de 2011

Películas para buscar


Colosio, el asesinato

El fin de semana pasado pude observar la película "Colosio, el asesinato", la cual es de amplia recomendación, no por nada ha sido acreedora a diversos reconocimientos internacionales.

Se trata de una cinta que muestra la cruda realidad que se vive en la política de México y el gobierno priísta. Con una gran dirección, muestra una historia que atrapa al espectador en una historia muy bien contada e impactante.

Llena de datos duros y hechos relevantes, definen la estructura política de un país habido de cambios en el poder, su excelente dirección hace parecer que se tratara de una historia ficticia, sin embargo cualquiera mexicano sabe que no es fantasía.

Al mismo tiempo, logra definir de manera clara los motivos de quien o quienes pudieron ser los asesinos de Luis Donaldo Colosio, cuando buscó ser presidente de la república en 1994.



Amigos

Es la historia de dos personas que por circunstancias de la vida se vuelven amigos. Basada en hechos reales, promueve la reflexión acerca de la verdadera amistad, la honestidad, el compañerismo y el humor que se necesita para enfrentar una dura batalla.

Phillipe es un hombre millonario francés, que queda inválido, y Driss es contratado como su asistente, sin embargo se convierte en su mejor aliado y le enseña al millonario a volverse a reír y disfrutar de su vida aun bajo circunstancias difíciles, por lo que se vuelven incondicionales.

Este filme ha sido premiada en diversos lugares, y  es una de las películas que nadie debería perderse si es que quiere pasar un muy buen rato.

El cisne negro

Un filme del director Darren Aronofsky, nos muestra como una bailarina de ballet clásico, representada por la actriz Natalie Portman (Nina Sayers), tiene que cambiar su modo de vida y desarrollar en ella su sensualidad, para poder representar los papeles protagonistas de El lago de los cisnes, a Odette, el cisne blanco, y la perversidad de Odile, el cisne negro.

En esta historia, se pueden observar los costos, sacrificios y abusos a los que se someten las bailarinas, no sólo en su formación profesional, sino en su propia casa, ya que Nina también tiene que lidiar con las exigencias de su madre, una bailarina retirada, que pretende que su hija sea la mejor, lo que colabora en gran medida a que la bailarina llegue a su nivel máximo.

El gran conciero

El gran concierto, una comedia donde vemos a Adrei Filipov (Alexei Guskov), ex director de la orquesta Bolshoi de Moscú, que fue retirado de su cargo y degradada a conserje del teatro, después de haberse negado a correr a los integrantes judíos de su agrupación, mientras estaba el conflicto bélico en la Unión Soviética.

Esta cinta dirigida por el francés de origen rumano Radu Mihaileanu, nos muestra a este personaje donde por azares del destino recibe una invitación desde París dirigida a la nueva Orquesta Filarmónica. Es así como se le ocurre que él y su antigua orquesta podrían ofrecer un gran concierto con partituras de Chaikovski.

Es así, como este gran director se da a la tarea de volver a ser lo que antes fue con tanto apego, sin embargo, por su camino se cruzan algunos desencuentros que podrían afectar su sueño.

El turista

El turista es una película de acción y comedia, cuenta con la dirección de Florian Henckel von Donnersmarck, donde nos deja ver un ambiente lleno de vida y romanticismo en la bella ciudad de Venecia.

En esta historia Johnny Depp (Frank) muestra su lado simpático e intelectual, ya que es un maestro de matemáticas, que se ve envuelto en un conflicto de acción debido a que conoce a Angelina Jolie ( Elise), una agente secreto muy elegante de la policía.

En esta historia, que muestra acción y mucho romanticismo, el bello paisaje donde se rodó el filme le roba un poco la atención a los protagonistas de la película y hacen que el espectador quiera visitar este lugar, no obstante, es una historia entretenida y dinámica.

domingo, 20 de febrero de 2011

Estatuas y fieles sobre Reforma

Caminando con peregrinos de Estado de México sobre Reforma, en la Peregrinación Anual de Toluca al Tepeyac

Una miradita monumental.


Caminata de peregrinos sobre Reforma.

jueves, 10 de febrero de 2011

Un vistazo por Mazunte, San Agustinillo y La Ventanilla, Oaxaca


En esta ruta por las playas de Oaxaca existe un lugar se llama Mazunte, un lugar mágico de noche y de día, hombres y mujeres, en su mayoría turistas, gustan de tomar el sol, bucear, caminar, leer, platicar, etc. A pesar de ser un pueblo pequeño y contar con pocos establecimientos, los que se encuentran aquí son muy entretenidos y permiten deleitar la vista del turista con una vista hacia el mar.

Además, en este lugar se encuentra el Centro Mexicano de la Tortuga, donde se pueden observar tortugas de todo tipo y donde los científicos realizan investigaciones para incrementar el conocimiento sobre la biología de las tortugas.   http://www.puertoangel.net/mazunte/tortuga_es.html



Caminando por este lugar, el encargado de una tienda de artesanías me contó de un bar, al cual no podía faltar y donde observé que es muy visitado por turistas, en especial de los que gustan del reggae, ya que un grupo de músicos que tocan este género de música hicieron su debut, deleitando a todos los presentes con música de este tipo y donde una joven de origen estadounidense canta en inglés y español, para que después de unas buenas canciones todos los presentes se animan a bailar y cantar. Por último, la banda se despidió y todos los que se quedan empezaron a bailar cumbias y música que ponían en el lugar, el cual está a cargo de dos personas, que por su forma de hablar, parecían de origen chileno o argentino.

También he de contar, que en este lugar se fuma mucha mariguana, y como un joven de Italia, que conocí en este lugar, me contó que aquí todas las personas la consumen y que también  todos la venden. Además de esto, este lugar fue muy bueno para conocer a todo tipo de gente, aquí se ven mezcladas distintas culturas y se escucha hablar de viajes y anécdotas de todo tipo.

Al día siguiente, mi acompañante y yo visitamos la playa San Agustinillo, que se encuentra a 10 minutos de Mazunte, donde se puede llegar gracias a una camioneta comunitaria que cobra 5 pesos mexicanos. En esta bella playa se puede realizar muy cómodamente una sesión de fotos tanto personales, como de paisaje, cuenta con unas rocas magníficas y unos cubos de luz excelentes para distintas tomas, asimismo el color del mar es de un azul muy limpio y cristalino, y se pueden ver algunas especies de peces pequeños.

En este sitio, conocimos a una turista de origen chileno, ella viajaba sola y tenía al rededor de 35 años, nos contó que ella practicó el buceo en este lugar y que pudo ver una gran variedad de especies marinas, como tortugas, peces globo y otros peces. Aseguró que le encanta México y que ha visitado un sinfín de lugares, como Baja California, donde pudo ver de cerca a las ballenas, además, nos invitó a visitar su país donde aseguró que allá los turistas pueden nadar junto a estos cetáceos.

Por otro lado, esta visitante extranjera nos hizo algunas recomendaciones para visitar, como un lugar llamado 'La Ventanilla' que es una zona de manglares, donde se pueden ver cocodrilos, tortugas y aves en su hábitat natural; al cual nos dirigimos a primera hora del día siguiente. Al igual que de Mazunte a San Agustinillo, se encuentra a 15 minutos después de tomar la camioneta colectiva que cobra 5 pesos mexicanos, posteriormente es necesario caminar durante aproximadamente 10 minutos.

'La Ventanilla' está a cargo de una cooperativa de pescadores que se dedican a dar paseos turísticos en lancha por el lugar, no obstante, es necesario caminar por la playa, la cual es de un clima extremadamente caliente, la cual usan las tortugas marinas para desovar sus huevos y donde los mismos pescadores rescatan estos huevos para que posteriormente ellos puedan liberar a las tortugas. Bajo un sol radiante y después de caminar en aquella playa solitaria, llegamos a las lanchas para observar un par de cocodrilos y distintas especies de aves y tortugas. Al último, llegamos a una pequeña estancia donde los trabajadores tienen una  pequeña reserva de animales que han rescatado en este lugar, como zorros, changos y otros.

Después de esta visita, se terminó el tour por las playas de este estado y nos dirigimos a Pochutla, con el fin de adquirir algunos productos o recuerdos, sin embargo, lo que encontramos fue comida, como peces asados, posteriormente fuimos a una iglesia, la cual contaba con un campanario que tenía una vista perfecta para sacar más fotos. Así se terminó este viaje por Oaxaca, con lugares maravillosos, hospedaje accesible, trasporte económico y práctico, y un sin fin de personas para conocer.

martes, 8 de febrero de 2011

Fuera la ropa, visita a Zipolite, Oaxaca

 Hola de nuevo, en esta nueva etapa de la revista Aventúrate sigue el gusto por los viajes, la fotografía, el diseño, la música y un sin fin de temas necesarios en la vida de cada ser humano.

Iniciemos con un viaje por algunas de las playas de Oaxaca, en primer lugar les platicaré de Zipolite, un lugar que se ubica a 30 minutos del Aeropuerto de Huatulco, o bien, a 25 minutos de la terminal de autobuses de Pochutla, saliendo de ambos lugares se pueden abordar taxis colectivos que cobran aproximadamente 50 pesos, o bien, si se encuentran en la segunda ruta pueden esperar las camionetas colectivas que salen de Pochutla y que cobran $7 pesos, e indicarle al chofer hacia donde te quieres dirigir.

En este caso, como ya lo indiqué al inicio, la ruta fue Zipolite, un lugar tranquilo con turistas de diversas partes del mundo, donde varios hombres y mujeres se despojan de sus ropas para mostrar sus cuerpos al desnudos y pasean o se asolean por la playa. Durante la mañana es muy común ver a varias personas, entre ellas a varios jóvenes correr o practicar algún deporte como el buceo.

Por la tarde, es fácil ver a todos los paseantes simplemente asoleándose, escuchando música o practicando surf, ya que el oleaje en este lugar es un poco pronunciado, y en todo el tiempo en que permanecí ahí los encargados del lugar mantuvieron unas banderas rojas, lo que indicaba que las olas eran un poco peligrosas para las personas que no saben nadar.

Cabe resaltar, que en este sitio el hospedaje fue muy económico, cada noche en una recámara tipo cabaña, con dos camas matrimoniales y un baño que se comparte con los inquilinos costó $100 pesos mexicanos. Sin embargo, en este lugar también existían otras habitaciones que contaban con una excelente vista al mar, tenían su propio baño, y en la parte de afuera cada recámara albergaba un par de hamacas para poder disfrutar de esta vista tan exquisita, todo por el precio de $300 pesos mexicanos por noche. Pero este sitio en general fue confortable, la palapa del lugar tenía hamacas para todos los que quisieran disfrutar de la vista al mar, descansar, leer, dormir, platicar, etc.

Durante la noche, se puede disfrutar de alguna bebida en los camastros que se encuentran en la orilla de la playa, tomar algo fresco o tan sólo observar la inmensidad del cielo, que por fortuna fue despejado y me permitió distinguir las estrellas, algo que aprecie demasiado, ya que esta vista es poco común en las ciudades como en el Distrito Federal.

Además, en este maravilloso lugar, durante la puesta de luna llena todos los turistas y habitantes del lugar que decidan asistir, se reúnen en la playa para hacer una fogata y tener una pequeña reunión, lo que sirve para conocer personas. Pero aquí no podré dar muchos detalles, pues el día en que estuve ahí no pasó esto, y sólo escuché este comentario de uno de los vendedores de otra playa.

Al día siguiente, un señor me ofreció un tour por distintas playas de Oaxaca, donde me aseguró que si tenía suerte podía ver ballenas, delfines, tortugas, etcétera, todo por $170 pesos mexicanos. El viaje que duró aproximadamente cuatro horas, lo realicé junto con otras personas, en su mayoría extranjeros y todos quedamos maravillados con lo que vimos.

De entrada, nos llevaron a la playa Panteón, una playa demasiado tranquila, haciéndole honor a su nombre, donde un señor nos llevó en su lancha a recorrer distintas playas y donde a lo lejos, como él lo dijo desde un inicio, pudimos observar una ballena, asimismo, una compañera del viaje, aseguró que también vio un delfín y después todos pudimos ver una tortuga, una mantarraya, y por último, el capitán de este viaje, nos permitió bajar al mar y nadar con o sin equipo de seguridad, como chalecos, para lo cual nos prestó visores para observar los peces que nadaban junto a nosotros.

De regreso a la habitación y después de un buen baño, salí a disfrutar del ambiente nocturno, y observar como es que todos se divierten en este sitio y me di cuenta que como es tanta la afluencia de turistas de distintas nacionalidades, existen establecimientos para todo tipo de paladar, desde una pizzería, un café italiano, un restaurante de comida china, hasta una cantina y tiendas para que cada quien se surta su propio menú.

Pero por ahora este relato se termina, después continuaré con la playa Mazunte, San Agustinillo y otras playas más de Oaxaca.